La apnea del sueño es una enfermedad respiratoria que se caracteriza por la interrupción de la respiración mientras se duerme.
Esta situación se debe a que se produce el cierre de la vía respiratoria superior y que incluye las fosas nasales, la laringe, la faringe y la boca.
Una de las dudas más habituales que están relacionadas con esta patología, es determinar la razón por la que se produce.
Pero, antes de conocer las causas de esta enfermedad, es preferible establecer los diferentes tipos de apnea del sueño que existen.
Tipos de apnea del sueño
Empezamos mencionando la opción más común: la apnea obstructiva del sueño y que está considerada como el tipo más frecuente, se caracteriza por el bloqueo o estrechamiento de las vías respiratorias durante el sueño.
Entre las principales causas que hacen posible esta variedad de apnea, destacaremos el sobrepeso, las alteraciones en la mordida o la posición de la mandíbula.
Además, no podemos olvidar una serie de factores de riesgo como el alcohol, el tabaco o dormir boca arriba.
Otra variedad de esta patología es conocida como apnea central del sueño, siendo un tipo de apnea que es mucho menos frecuente en comparación con la anterior.
En este caso, el cerebro deja de enviar la señal necesaria para el correcto funcionamiento de los músculos involucrados en la respiración.
Una de la particularidad de la apnea central del sueño, es que puede afectar a cualquier persona, aunque es más habitual en aquellas personas que cuentan con una serie de factores de riesgo como la obesidad mórbida o el consumo de ciertos medicamentos como los narcóticos.
Finalmente, no nos podemos olvidar de la conocida como apnea mixta, es decir, aquella patología que combina ambas variedades de apnea.
¿Cuáles son los síntomas que provoca la apnea del sueño?
Primeramente, destacaremos que el síntoma más común es la interrupción de la respiración durante el sueño. Estas pausas pueden tener una duración que oscila entre los 10 y 20 segundos, aunque existen casos que pueden superar el minuto.
Por norma general, una persona afectada por esta patología, sufrirá más de 5 interrupciones a la hora, aunque esta cantidad puede llegar a ser muy superior.
En caso de que se produzcan más de 30 interrupciones por hora, estaremos ante un caso de apnea grave.
¿Qué síntomas se manifiestan durante la apnea del sueño? Bien, estas pausas en la respiración suelen ir acompañas de ronquidos, molestias en el tórax, sofocos, ansiedad, sudoración nocturna o insomnio.
Además, es preciso destacar que la apnea del sueño causa somnolencia, cansancio, irritabilidad o la disminución del deseo sexual.
¿Cómo se trata la apnea del sueño?
Hoy en día, existen una amplia variedad de alternativas a la hora de tratar esta enfermedad crónica.
Una de las opciones más comunes es la prótesis que se introduce en la boca, para así mantener la mandíbula hacia adelante y evitar el bloqueo de las vías respiratorias.
Por otro lado, mencionaremos el tratamiento con presión continua positiva como otra solución muy útil, siendo un sistema de ventilación mecánica que nos permitirá recibir un flujo suave de aire constante.
Finalmente, no nos podemos olvidar de la cirugía como otra solución para la apnea del sueño, siendo una intervención que consiste en la extracción del tejido sobrante de la garganta o corregir los problemas faciales a nivel estructural, entre otras opciones.
En consideración, podemos determinar que la apnea del sueño es una enfermedad común y habitual que se caracteriza porque el paciente interrumpe la respiración mientras está durmiendo, con la ventaja de que existen diferentes tratamientos efectivos para controlar esta patología.
